Una de las mayores desgracias de la crítica literaria consiste en que los amigos comenten los libros de los amigos, o que se reseñen los libros de los enemigos, sin advertirlo a los desprevenidos lectores. Por eso, me gustaría expresar mi opinión sobre La marca del meridiano manifestando mi admiración personal por Lorenzo Silva, uno de mis escritores españoles preferidos desde que lo descubrí en 1996 …