No es ningún secreto que el género negro está experimentando una nueva época dorada, forzado en gran parte por la amarga situación política y social que nos ha tocado vivir. Alejado de modas pasajeras, el resurgimiento del género puede considerarse un movimiento literario en toda regla, alentado además por la aparición de nuevos talentos que lo cultivan con destreza y pasión, y rara es la editorial que no cuenta ya con una línea de novela negra en su catálogo.
A continuación me gustaría presentarles a algunos de esos escritores, nombres que ya empiezan a sonar y que están destinados, en un futuro no muy lejano, a convertirse en referentes del género. Autores, por tanto, que han irrumpido con fuerza en el anquilosado mercado editorial demostrando que la renovación es posible y que los consagrados como Lorenzo Silva, Alicia Giménez Bartlett y Juan Madrid tienen el relevo asegurado.
El género negro es tan amplio y abarca tal cantidad de estilos que he tratado de hacer una lista lo más heterogénea posible, con autores de novela criminal, de novela policiaca, de thrillers, de historias con una gran carga de crítica social e incluso alguno que se atreve a añadir ingredientes de fantasía a sus relatos. Puede que me deje alguno, pero les aseguro que los que están se han ganado el sitio por derecho propio.
Alexis Ravelo (Las Palmas de Gran Canaria, 1971). Hasta hace un par de años era prácticamente un desconocido en la península, algo que cambió con la publicación de La estrategia del pekinés de la mano de la editorial Alrevés. Con un estilo ágil y una prosa que rezuma rebeldía y ganas, no ha tardado en convertirse en un referente de la novela negra nacional, algo que consolidó al alzarse con el XVII Premio Getafe de Novela Negra con La última tumba (Edaf). Hace unos meses, además, ganó por unanimidad el prestigioso Hammett de novela negra por delante de autores de la talla de Dolores Redondo, Rosa Ribas o Jorge Zepeda Patterson. Blog.
César Pérez Gellida (Valladolid, 1974). Pocos escritores consiguen irrumpir con tanta fuerza con su primera novela. El estilo descarnado y valiente de Memento mori (Suma de Letras), primera parte de la trilogía Versos, canciones y trocitos de carne, le ha valido el fervor incondicional de miles de lectores, afianzándole como uno de los máximos exponentes de la novela policiaca en español en lo que se ha llegado a calificar como Género Gellida. La persecución de un asesino en serie por las calles de Valladolid es el punto de partida de la trilogía, que completó con otras dos novelas que manifiestan su enorme arsenal creativo. Web.
Berna González Harbour (Santander, 1965). En 2012 publicó su primera novela, Verano rojo (RBA), con la que comenzó la saga de la comisaria María Ruiz y en la que se adivinan unos amplios conocimientos de criminología y procedimiento policial. La segunda novela de la saga, Margen de error (RBA), ha servido para terminar de perfilar unos personajes bien construidos y para reafirmarla como una autora a tener en cuenta en el futuro. En sus historias intervienen factores tan actuales como el auge de las redes sociales o el movimiento 15-M, que retratan de forma fiel la realidad social en la que nos movemos.
Paul Pen (Madrid, 1979). Dos novelas han bastado para que Paul Pen se consolide como uno de los más reputados autores de thriller psicológico en la actualidad. Sus lectores son legión y varios medios ya le han bautizado como «el Stephen King español», sobrenombre que él rechaza pudorosamente pero que, entre usted y yo, le viene como anillo al dedo. Su novela El aviso (RBA) sorprendió con una trama de lo más inusual. En su segunda obra, El brillo de las luciérnagas (Random), Pen nos sumerge de lleno en un thriller asfixiante brindándonos una trama turbia y enigmática narrada a través de los ojos de un niño de diez años. Web.
Ramón Palomar (Valencia, 1966). Con una sola novela publicada se ha ganado un hueco entre los grandes autores de género negro de España por méritos propios. Su ópera prima se titula Sesenta kilos (Planeta) y cuenta una historia sórdida y agresiva que nos lleva al otro lado de la ley de la mano de exlegionarios, prostitutas, traficantes, proxenetas… bordeando los límites de la sensatez hasta mucho más allá de lo razonable. La historia de sesenta kilos de coca malditos que dispararán las pretensiones y los sueños de un puñado de miserables que verán en ellos la llave para cambiar de forma radical su existencia. Estamos a la espera de nuevas entregas. Web.
Víctor del Árbol (Barcelona, 1968). Un escritor excepcional que, hasta el momento, ha obtenido mayor reconocimiento fuera de nuestras fronteras que dentro. Tanto es así que en una entrevista aseguró que si había podido pedir una excedencia en su trabajo como Mosso d´Esquadra y dedicarse a escribir era gracias a sus lectores galos. Entre sus novelas destacan Respirar por la herida y la impactante La tristeza del samurái (Alrevés). Su pericia narrativa no ha pasado desapercibida para Destino, que ha apostado por su última novela, Un millón de gotas, con la que seguro alcanzará en nuestro país el mismo éxito que ya ha cosechado en Francia. Web.
Esteban Navarro (Moratalla, Murcia, 1965). Además de ser uno de los autores de cabecera de Ediciones B, Esteban Navarro es Policía Nacional, lo que le otorga un enfoque privilegiado de la investigación criminal y unos altísimos conocimientos de procedimiento policial, algo que no duda en aplicar a sus realistas novelas. El éxito de sus historias le convirtió en su día en uno de los abanderados de la llamada Generación Kindle. Un verdadero ejemplo de cómo el esfuerzo y el trabajo duro, antes o después, obtienen su recompensa. Y un autor de lectura obligada para los amantes del género negro. Web.
Susana Hernández (Barcelona, 1969). Una de las autoras con más fuerza y solvencia del panorama literario actual. Es responsable de las novelas La casa roja y La puta que leía a Jack Kerouac y de la serie de Vázquez y Santana, compuesta por las novelas Curvas peligrosas y Contra las cuerdas. Su pluma destila fluidez, eficacia y buen gusto, además de un encomiable trabajo de documentación que eleva el valor de sus historias muy por encima de la media. Susana Hernández construye tramas interesantes y muy adictivas, huyendo de clichés y sorprendiendo al lector. Una de esas autoras que puedes recomendar sin temor a equivocarte. Blog.
Bruno Nievas (Almería, 1973). Cuando escribió su primera novela, Realidad aumentada, no encontró ninguna editorial que quisiera publicarla, por lo que tomó la decisión de ofrecerla en internet para su descarga gratuita. Su solvencia quedó demostrada al conseguir más de 42.000 descargas en cuatro meses, llamando así la atención de Ediciones B. Su segunda novela, Holocausto Manhattan, le ha servido para reafirmarse como uno de los autores más prometedores del país. Su forma de escribir le ha valido comparaciones con Juan Gómez-Jurado o Douglas Preston. Web.
David Llorente (Madrid, 1973). Autor de la que es, sin duda alguna, la novela más sorprendente que he leído en mucho tiempo: Te quiero porque me das de comer (Alrevés). Una historia inquietante, arriesgada y muy valiente, con una estructura aparentemente caótica que parece diseñada para despertar el mayor número de sensaciones posibles. Un auténtico bombazo no apto para todos los públicos que me cautivó desde la primera página. Las andanzas de un psicópata en el barrio de Carabanchel constituyen el eje principal, aunque tratar de resumir el argumento en unas líneas sería como tratar de atrapar el desierto con un cubo y una pala.
Benito Olmo